Heridas ocultas en un thriller intimista, una historia sobre el rencor y sus consecuencias. Una novela negra que ya está disponible en versión digital y en papel aquí.
¿A qué viene escribir una novela negra?
Durante las últimas semanas he dedicado el blog a compartir un adelanto de mi nueva novela, Heridas ocultas. Y creo que ya puedes hacerte una idea de que va. ¿O no?
Bueno, venga, te hago un resumen ¡sin destriparla!:
El cuerpo de Teresa Torres ha aparecido en el suelo de un apartamento turístico con una brecha en la cabeza. Podría tratarse de un desafortunado accidente, pero el inspector Ángel Gaya se ha propuesto descubrir quién fue la última visita que recibió Teresa.
Los propietarios del apartamento, Ana y Jorge, son una pareja en crisis que tendrán que decidir qué hacer con su matrimonio.
Mientras tanto, un joven que huye de la ciudad y de su familia tropezará con un pasado del que nada sabía.
Heridas ocultas es una historia con intriga, personajes llenos de oscuras intenciones y muchos secretos que desentrañar. Una novela negra sobre el rencor y sus consecuencias. Sobre la búsqueda de la verdad y la huida de ella.
Una historia sobre la venganza, también. La venganza y su sabor amargo.
Y, en fin, ansiosa estoy por conocer tu opinión.
Y, en fin, ansiosa estoy por conocer tu opinión.
Son muchas las personas que leyeron la anterior novela, Alas negras y chocolate amargo, y me pedían que me diera prisa en publicar una nueva historia. He tardado tres años en lograrlo. Han sido muchas las horas invertidas, mucho el tiempo dedicado en crear y estructurar las tramas que se entrecruzan y en construir unos personajes lo más reales posibles.
Es una novela coral, creada a partir de una frase, una sola frase leída en uno de los testimonios femeninos que recibí hace años para escribir uno de los libros de sexualidad femenina que tengo publicados. Algo que plasmó una escena en mi mente, y ya no me abandonó.
Un día escuché una noticia en el informativo de no recuerdo qué canal televisivo, y tuve claro cuál era el final de esta historia.
Mi primera idea era crear una comedia gamberra, pero la vida tenía pensada otra cosa y me deshizo los planes. Cuando tu madre cae enferma en una situación de dependencia, como le pasó a la mía, poco sitio queda para el humor. Y eso que, como conté una vez, ella no lo perdió nunca.
De modo que Heridas ocultas es una novela negra, protagonizada por gente corriente, como tú y como yo, cuyas historias pueden ser más cercanas de lo que imaginas. No me he convertido con ella en una dama del crimen, ni voy a dejar de sonreír en las fotos, aunque me parece que se me ha colado entre las páginas de esta novela un retrato social con algo de denuncia.
Escribir es también una manera de rebelarme contra asuntos que me indignan. Y la novela negra es un territorio perfecto en el que mostrar las injusticias.
Pero dejaré que sean los lectores quienes digan qué encuentran en sus páginas.
Publicar una novela es como soltar la mano de la criatura que acabas de dar a luz después de un parto muy largo y fatigoso, aunque lleno de gratos momentos. Y ahora que camina sola, a la escritora le gustaría saber si valió la pena el esfuerzo, si no es ella la única que ha disfrutado con esta historia. Por eso, si te animas a leerla, espero que me cuentes tus impresiones. Seguro que esas palabras serán la energía que necesito para lanzarme ya con otra nueva historia.
Para empezar a leer Heridas ocultas solo tienes que pinchar aquí.
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